martes, septiembre 04, 2007

Cortesía, signos.

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> Más tarde, recordando [Franco] cosas de la guerra recordó lo siguiente:

«En un vuelo que hicieron Sangróniz y el coronel Villanueva de Badajoz a Sevilla al empezar la guerra, el avión se perdió y el piloto se dio cuenta de que se acababa la gasolina, y en consecuencia ordenó a los viajeros que se pusieron los paracaídas y se preparasen a tirarse al espacio. Se abrió la trampilla para tirarse. Sangróniz y Villanueva se abrazaron y despidieron hasta la eternidad, y se dijeron el uno al otro: "Pase usted primero, Sangróniz"; "De ninguna manera, usted primero, Villanueva", y así forcejeando y sin tomar ninguno la delantera, el piloto descubre entre unas nubes un poco de tierra y les dice que no hay necesidad de tirarse, pues están cerca del Estrecho, pero que ignora si en las cercanias de Málaga o de Tarifa. Con la incertidumbre natural y el pánico de caer en zona roja, aterrizaron en un campo y allí esperaron a que se acercasen algunos chicos que vieron tomar tierra al avión. Si cierran el puño estamos perdidos, dijeron todos los tripulantes, pero en esto los chicos levantaron el brazo y gritaron "Arriba España" [En 'Mis conversaciones privadas con Franco' correspondiente al día 6 de diciembre de 1955[*] del Teniente general Francisco Franco Salgado-Araujo, primo y ayudante del dictador].
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[*]-Estos apuntes o memorias son, junto a las de Azaña, las políticas que encuentro más interesantes escritas en el siglo pasado en España.

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