domingo, marzo 01, 2009

Víctimas y muertos, derechos y privilegios.


Se puede opinar si a las víctimas [paradigma, las del terrorismo] se les llegan a conceder derechos que no cabe considerar sino privilegios. En el blog de AE de El Mundo se ha tocado eso.

Bien, ¿y a los muertos simples o a los simples muertos? ¿El que se estime casi un delito, por supuesto de pésimo gusto, el decir algo malo de ellos cuando alcanzan a serlo dejando de estar vivos -digamos en tanto no se han enfriado en el inmediato recuerdo y por lo mismo se habla de ellos- no es también un derecho mal entendido, es decir, un privilegio?

Lo digo porque a mí éste -que ya no es nada- cuando era y en cierta ocasión me pareció un mal bicho.

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